2. El relieve de la Tierra


El relieve de Europa


Europa es un continente pequeño, con unas dimensiones de Esta a Oeste de 5000 km y 4000 km de Norte a Sur. Es una gran península del continente euroasiático, rodeada de diversos océanos y mares: el océano Glacial Ártico, al Norte; el oceáno Atlántico, al Oeste; y el mar Mediterráneo, al Sur.

 

El continente europeo

El continente europeo está formado por tres grandes conjuntos del relieve:

  • La Gran Llanura Europea. Una estrecha franja desde el Oeste (en Bélgica y los Países Bajos) hasta ocupar la práctica totalidad de la Rusia europea. En general, se trata de una zona de pequeñas y monótonas colinas surcadas por grandes ríos.

  • Las mesetas y los macizos montañosos antiguos, como la Meseta castellana, el Macizo Central francés, los Montes Escandinavos o los montes de las islas Británicas. El relieve se caracteriza por una sucesión de montes muy desgastados y de escasa altitud, separados por extensos valles.

  • Las cadenas de montañas jóvenes. Son montañas de formación más reciente que los macizos. Se localizan principalmente en el Sur de Europa, y presentan un relieve elevado y abrupto que dificulta las comunicaciones (Pirineos, Alpes, Cárpatos, Apeninos, Balcanes, Cáucaso, etc.).


El relieve de España


El relieve de España está formado por la Península Ibérica y los dos archipiélagos, Baleares y Canarias.

 

La Península Ibérica y los archipiélagos

El relieve peninsular se caracteriza por su elevada altitud media y su complejidad, ya que lo forman la Meseta, las cordilleras y sistemas montañosos, y las grandes depresiones y costas.

La Meseta es la unidad del relieve central de la Península Ibérica y la de mayor superficie. En su interior se eleva el Sistema Central y los Montes de Toledo.

Tres grandes cordilleras rodean la Meseta y la aíslan del resto del territorio peninsular: la Cordillera Cantábrica, al Norte, el Sistema Ibérico, al Este, y Sierra Morena, al Sur.

Fuera de la Meseta se hallan las alineaciones montañosas de los Pirineos, las Cordilleras Costero-Catalanas, las Cordilleras Béticas y el Macizo Galaico, así como dos grandes depresiones, la del Ebro, al Este y la del Guadalquivir, al Sur.

Las costas altas y poco accidentadas alternan con amplios arcos de costas bajas y arenosas, como las del golfo de Valencia y el de Cádiz. Únicamente en las rías gallegas, las costas son recortadas con zonas que sirven de refugio a la navegación.

El relieve de las islas Baleares se considera una continuación del relieve peninsular y con características similiares a este.

El relieve de las islas Canarias es muy accidentado y de origen volcánico.